Compañeros en la administración

¡Hola gerundianos!

Esta vez quiero hablaros de los compañeros que podemos encontrarnos en el camino de la administración, tomaros unos segundos y pensad con quién podríais compartir mesa el día de mañana en una empresa. Un chico con gafas, gente más mayor que tú...

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¿Quién ha pensado en gente con capacidades diferentes?

Mi escuela ha establecido una alianza con la Asociación Down para ayudar en la inclusión de estos compañeros, ya llevan unos años con ella y va viento en popa.

Gracias a esta innovación de la escuela, en mi equipo de trabajo está Nacho, tiene Síndrome de Down, pero os aseguro que es más constante que muchos de nosotros. Lo único que requiere es tolerancia, compañerismo, paciencia y un poco más de tiempo. 

Dime, ¿éstas son cualidades que usarías con el compañero que te imaginaste al principio? Yo diría que sí, no somos tan diferentes.

Pero hay algo en lo que mucha gente falla cuando ven a otras personas trabajando con estos compañeros y es que no se paran en conocer la metodología de trabajo que se lleva a acabo con ellos, en clase y en casa. En realidad no saben qué necesitan para trabajar bien, cuánto tiempo requieren para llevar a cabo las cosas o cuánto amor necesitan.

Por todo esto, si algún día tenéis la tremenda suerte de trabajar con alguien como Nacho o con otro tipo de capacidad diferente os recomiendo que no dejéis pasar la oportunidad y os empapéis de su mundo, de su forma de ver las cosas, y sobretodo aprenderéis que hay otras formas de trabajar en las que todo el mundo cuenta, solo se necesita tiempo y eso es gratis. 

Agradezco el interés de todas las personas que rodean a estos chicos, porque se sientan a su lado para cerciorarse de que todo va viento en popa como el trabajo que ha conseguido Nacho en clase, que entienden el nuestro y se esfuerzan cada día por ser mejores, porque ellos necesitan gente excelente a su lado, tan excelentes como ellos. 

De esto no tengo PowerPoints ni links, esto no se aprende en los libros.

Hoy le pregunté: "Nacho, ¿tú tienes días malos?" y me dijo "No". 

¡Hasta el próximo!

Lucía.